viernes, 10 de diciembre de 2010

Resumen final del semestre

Dedicado a Laura en Sincelejo, por la ayuda que me dio para sacarme de encima a Bocarejo. Y al profesor Álvaro Duque de Introducción al Periodismo: esas tres horas a la semana compensaron las puteadas por Lógica y Geografía Humana, las peloteras de los trabajos en grupo, y me permitieron mi momento de gloria del año: entrevistar al Pibe Valderrama.

Hoy, 10 de diciembre de 2010, el Colegio Mayor Nuestra Señora del Rosario entrega las notas definitvas del segundo semestre del 2010. Dato que no les interesa pero a mí sí: hoy se entregan las notas definitivas de mi primer semestre como periodista. Así mismo, hoy, 10 de diciembre, salieron los recibos de pago en dicha alma mater. La importancia del dato: debido a que logré mantener mi promedio por encima de 4.0, mantengo media beca. Traducción: sigo estudiando periodismo en universidad privada.

¿Por qué la importancia de que sea "la universidad privada"? Como muchos de los lectores saben, yo estuve durante casi 6 años dando tumbos en LA universidad pública: la Universidad Nacional de Colombia. Las dinámicas entre universidades son muy distintas, y aún el paso por la Facultad de Ciencias Económicas de la Nacho, que es lo más parecido a una universidad privada que hay adentro, es difícil de comparar. Sobre todo, considerando el factor económico y de estratos, que me ocasionaron algunos problemas complejos de lidiar durante los 5 meses que separan este post, escrito en la semana de inducción de este post.

A eso, añádase que yo soy viejo para ser primíparo. 22 años son edad en la que hoy día, la mayoría de la gente está firmando diplomas y saliendo a matarse en las oficinas, como muchos de mis lectores lo hacen hoy día. Si no me cree, vea la edad promedio de los pasantes en su carrera o en la empresa donde trabaja: 21 o 22 años. Yo cumplo 23 en el próximo mes. Y apenas voy a empezar segundo semestre.

El resultado final de todo esto: estoy desconectado del resto de los primíparos. Su crianza está en otras partes: un complejo que, en términos netamente culturales, resultaba muchísimo más variado que el de la Nacional, pero que de los 19 estudiantes a Periodismo y Opinión Pública que entramos, sólo 3 no somos de estratos socioeconómicos 5 o 6. Añado otra de las estudiantes de transferencia: 4 de 21. Los otros 17 (el 80% de la población de este semestre, haciendo cálculo expreso) resultan venir de un esquema socioeconómico similar, y estar metidos en un mismo ambiente en general de crianza.

Es así como quedé desconectado de ellos. Mientras los primíparos estaban en 7º u 8º grado, yo ya lidiaba contra las crudas lides de la ingeniería química, llámese el cálculo diferencial, la transferencia de calor o el movimiento de fluidos. Ellos apenas despuntaban a los licores y las celebraciones cuando yo me metía las festividades del siglo con todo tipo de gentes: los días de los prom para ellos fueron los días del Container para mí. Ellos oyen reguetón, cosa que, a pesar de haberle dado múltiples oportunidades, nunca podré aguantar, ni siquiera borracho. Ellos no conocen lo que es el trabajo, sea arreando madera en el aserradero de mi prima (2006), cargando cajas llenas de documentos mohosos propiedad de Davivienda (2010) o andando - literalmente: a pie o en bus - la ciudad entera en busca de una dirección para una aseguradora (2007).

Aún así, a pesar de todo no estoy resentido con los primíparos. Ellos están despuntando hasta ahora. De los 19 que entramos este semestre, hay 4 que se retiraron ya a estudiar otras cosas. Éxitos en sus vidas futuras a ellos. Quedamos 15, y 2 de transferencia: 17 estudiantes de primer semestre. En la primera semana de febrero, tendremos que volver a vernos las caras los 17, a ver quién va a estudiar qué con quién y en qué horario. Ellos tendrán que lidiar por primera vez con el sistema, con las inscripciones académicas y con los cruces de horarios. Yo, me armaré de paciencia porque eso es lo que hay.

Ah, cierto, resumen de semestre: todo bien. La calidad académica del Rosario es innegable, aunque la exigencia es menor que en la Nacional. O si es mayor, yo sinceramente no la sentí; muy seguramente, era por estar haciendo algo que me gusta. Varias materias por encima de 4.5, sólo una por debajo de 3.5. Los profesores son excelentes académicamente hablando, y algunos, como mi profesora de Ética, son bastante buenas personas. He tenido tiempo para echar cabeza, más del debido, tal vez, y siempre llego a una pregunta: ¿hubieran cambiado las cosas si hubiera estudiado Periodismo en el 2004 y no en el 2010?

Para responderme, me quedo con la frase que mi profesora de Geografía Humana, que no se caracterizó nunca por los halagos, dijo cuando le entregué cierto taller que elogió profusamente: "bueno, tal vez usted no escribiría tan bien si hubiera llegado acá de 16 años. Con esa habilidad para analizar las cosas, le va a ir muy bien en el periodismo."

Dios la oiga, profesora Bocarejo. Dios la oiga.

Adenda:


Los visitantes de este blog también pueden ver mi nuevo Tumblr. Advierto: va a haber muchas fotos de automovilismo, con algunas ideas al estilo Paulo Coelho, como dijo mi fiel amigo @Jmondrag_ cuando lo conoció. Esa es la idea.

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