miércoles, 6 de abril de 2011

La Ley Lleras

El ministro del Interior y de Justicia, Germán Vargas Lleras, presentó el día de ayer ante el Congreso un proyecto de ley con el fin de regular el acceso a contenido por Internet sin cumplir con la normativa de derechos de autor. En pocas palabras, el proyecto de ley implica que podría penalizarse con cárcel a los que utilicen Internet para obtener artículos como películas, canciones, programas o libros sin pagar los derechos de autor, y sancionar a los proveedores de Internet que se presten a esta piratería con bloqueos de sus páginas, suspensión del acceso o simplemente dando de baja sus servicios.

Este artículo de Carlos Forero, en su página Segunda Plana (recomendadísimo de esta casa) contiene un análisis de 8 puntos que propone el autor para oponerse al proyecto. Más allá de obviedades como que este país tiene crímenes peores por los cuales preocuparse, o que la medida fue planteada desde el Mininterior sin consultar con un ente capacitado como lo es el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones, existen dos puntos de esta crítica que tomaré y desarrollaré para realizar la mía.

El primero: la norma induce directamente a asumir que todo el que descarga una canción o un libro lo hace pirateando. Ignora, de esta forma, la posición del freeware, el código libre y el copyleft: el ministro Vargas Lleras parece ignorar, a partir del lobby, que existe una comunidad de artistas que crean sus obras fuera del alcance de Sayco y Acinpro. Súmese a esto la exigencia de Sayco, donde uno literalmente no puede tener un radio o un computador con parlantes en un negocio desconectado y dañado, sin pagar, porque se vuelve ahí mismo evasor de derechos de autor. La normativa en ese tema, en particular en lo relativo a música, es supremamente retrógrada y desfasada con las realidades tecnológicas. Y los sobrecostos por estas normativas son escandalosos. Veía un tweet al respecto, según el cual un libro publicado en Argentina llega con 75% de sobrecostos a una librería colombiana por aduanas, impuestos y derechos de autor.

Ese es otro asunto. Muchas de las fuentes de la piratería se dan en realidad porque no hay más que hacer: en este país, la oferta musical y de literatura no académica, es excesivamente limitada. Por ejemplo, he volteado medio centro de Bogotá buscando obras de Harry Turtledove, y no he encontrado. Así mismo, en Colombia no hay un Amazon, Barnes and Noble, iTunes, Netflix u otro servicio que permita adquirir música, libros, películas o programas de televisión por Internet, sin problemas. Lo más cercano es la Librería Nacional con su compra de libros por Internet, un buen proyecto, pero limitado por lo que hay en sus propias estanterías y depósitos.

En fin, esta norma ha demostrado ser impopular. Yo me opongo a ella, por lo que he comentado arriba; no por los problemas de derechos de autor y la anarquía digital. Como puse en Twitter, yo apoyo una norma que penalice la piratería cuando haya alternativas válidas. La situación momentánea se presta para llevar a romper la ley a quien necesita o quiere realizar algo fuera de los límites de Sayco, las grandes editoriales, disqueras o estudios de cine. Y ciertamente, aunque es cierto que la piratería ha sido poseída, el país no puede seguir en esa tónica política de considerar culpables a todos por adelantado, sin antes averiguar sus motivos. Las normas deben adaptarse a la realidad, y la ley Lleras parece querer adaptar la realidad a una norma. En eso, espero que el MinTIC pueda prestar colaboración a la cartera del Interior, para evitar que Vargas Lleras, que lo iba haciendo bien como ministro, cometa un error similar al de la Ley SINDE en España, y el retroceso político que esto le implicó. Así sea por eso no más, pensando en las elecciones del 2014, Vargas Lleras debería reconsiderar la rigidez de su postura.

1 comentario:

Respetabilisima dijo...

Hola. Tengo tres novelas de Harry Turtledove en inglés. Si te interesa, responde a este comentario y nos comunicaremos.